miércoles, 14 de enero de 2015

Pablo Escobar: El capo de Colombia

Sabes, Pablo Escobar proviene de una familia humilde y aunque intentó vivir en la clandestinidad no pudo hacerlo porque su nombre se difundió entre las comunas de Medellín por ayudar a los menos favorecidos, sin embargo detrás de todas sus buenas obras se escondía su oscura realidad.

Imagínate que fue tanta su fama que el pueblo lo escogió como senador suplente para el Congreso de la República en Colombia, fue allí cuando no sólo se hizo una figura pública saliendo del anonimato sino que además se descubrió que traficaba con drogas, por ello fue expulsado del movimiento político al que pertenecía y fue denunciado por Rodrigo Lara Bonilla quien era el ministro de justicia, de quien se dice que Escobar presuntamente mandó asesinar.

Lo que no sabía el Estado colombiano en ese entonces es que Pablo no era un narcotraficante más, era de hecho el líder del cartel de Medellín por lo cual se le atribuyó el seudónimo del patrón o el zar de la cocaína debido a su gran influencia en ese mundo ilegal; fue gracias a esto que llegó a ser uno de los hombres más ricos en el comercio de esta droga y tuvo los mejores contactos dentro y fuera de su país.

Además para él esta mafia no era suficiente, por eso financió una amplia red de sicarios, trayendo consigo gran conmoción por sus actos terroristas y pasó de ser el político admirado a uno de los criminales más buscados en el mundo.

Pero no pienses que tuvo conflicto con la ley únicamente, también con su pareja ya que el capo tuvo una relación paralela a la de su esposa con una periodista quien después de muchos años ha dado testimonios de las muertes que planeó este narcotraficante.

Y aunque Escobar era un gran estratega para las rutas y comercialización de la droga su mayor debilidad fue su familia, por eso cuando trataba de escapar hacía constantes llamadas a sus hijos y esto fue el detonante para encontrarlo.

Sin embargo fueron necesarios 16 meses y cuatro mil efectivos para apresarle. Y aunque muchos supieron de sus actos corruptos pesaron más sus actos benéficos, por eso cerca de veinte mil personas asistieron al cementerio para su entierro.

Algunos de sus seguidores aun conservan la esperanza de que viva, incluso existen personas que especulan que todo fue un montaje bien hecho y que el capo reside en una isla de Europa donde todo su pasado quedó atrás.